A ver si aflojamos un poco con tanta estupidez, Passarella.

LA HISTORIA NUESTRA DE CADA DÍA

(Cáceres... otro que vidrieró y se fue)

El tema de la semana en River, como no podía ser de otra manera, fue la ida del paraguayo Cáceres. Como ya tratamos en varios comentarios, JC se rajó del barco que se hunde por una mera razón de guita, en la primera vez en la cual parece que los dirigentes fueron medianamente razonables y optaron por no garpar una guita que no les correspondía, y que el Nantes no estaba dispuesto a gatillar a pesar de que figuraba en el contrato.

Entonces, el paraguayo se sumó a la lista de defensores que hicieron "touch 'n go" en River, la cual integran Diogo y Leandro Fernández, en los últimos tiempos... claro, con la salvedad de que el Coti vino como jugador libre y se fue por 4 palos verdes, en el único caso en el cual este tipo de manejos le dejó buena guita a River.

Y Passarella salta a arreglar los problemas de la manera que más conoce: pidiendo refuerzos. A ver, River tiene cinco centrales a saber: Tuzzio, Lussenhoff, Nasuti, Gerlo y el impresentable de Talamonti, más algún aporte que puedan hacer las inferiores y la eventualidad de Federico Domínguez jugando de seis (lo hizo varias veces en su carrera, no sería una improvisación). Entonces, da mucha bronca ver que siempre se recurra a endeudar el club en lugar de aprovechar lo que ya tenés. Como si no lo hubiesen endeudado ya bastante. Pero eso sí, mandemos a un pibe como Villalba, alternativa como número 2, a préstamo a Rafaela y dale que va, salgamos a comprar total no lo garpamos nosotros, lo garpa el club. Pero hay cosas peores, y veámoslas.

AHUMADA, DE 5 IGNORADO A INSUSTITUIBLE

(Un 5 mandado a hacer para River)

El partido con Libertad por la Copa Libertadores no sólo sirvió para que se viera la paupérrima realidad de River, tal como se venía anticipando con un equipo que ni siquiera alcanzaba a completar el banco de suplentes. Aparte de todo, concluyó con una lesión de Oscar Ahumada que preocupa, ya que tiene para un mes afuera de las canchas.

La respuesta del Kaiser fue, justamente, salir a pedir un refuerzo. Y no se anduvo con chiquitas, parece que se descolgó pidiendo a Agustín Pelletieri, el 5 de Lanús que nos pintó la jeta la otra vuelta, y al Chaco Torres de Racing. Claro que los directivos salieron corriendo en cuanto les dijeron la cotización, porque no sea cosa de que se gasten en refuerzos guita que se puede distraer para el bolsillo. Entonces, de nuevo estamos a fojas cero.

Oscar Ahumada tuvo que apechugarla bastante para hacer suyo el puesto que tan bien supo cubrir Javier Mascherano. Postergado por tres técnicos distintos, dos de los cuales fueron número 5 de River en su carrera como jugador, y puesto atrás de alguna que otra compra impresentable como la de Andrés San Martín (a varios nos gustaría ver una carrera de 100 metros llanos entre San Martín y Riquelme, calculo que los dos salen últimos), justo es reconocer que Passarella supo leer los partidos de verano que jugó Ahumada y le dio una oportunidad que Oscarcito no desaprovechó para nada, siendo - en la Copa Libertadores sobre todo - de lo mejorcito que mostró River en la línea del mediocampo. Ahora, lejos de no tener variantes en ese puesto, River tiene 3 número 5, como ya dije antes, ya que a Ahumada se le suman René Lima y Nicolás Domingo como alternativas. Realmente, ¿hace falta traer un cinco más por un mes de parate que tiene Ahumada? Más sabiendo que ese mes implica apenas un par de partidos, ya que falta un ratito para que se arranque el campeonato, y más sabiendo la abundancia que hay desde el medio para arriba, ¿hace falta tanto gasto por un par de partidos? Si prospera la idea de Passarella, cuando Ahumada esté recuperado River va a tener cuatro volantes centrales, y va a terminar pasando lo de siempre... ciertas compras pedorras van a tapar a un par de proyectos más que interesantes de buenos jugadores, como lo son Lima y Domingo. Parece que el margen de maniobra de Passarella no es tan amplio como antes, que se dedicaba a arriesgar con un pibe antes de hacer gastar un mango. Y claro... después del fiasco del torneo y Copa pasados, sabe íntimamente, que si River no gana algo en este semestre, el contrato de tres años con el cual Aguilar lo está tentando para renovar no va a valer ni el precio del papel en el cual esté impreso.

¡BIEN POR INDEPENDIENTE!

(Un 10 mandado a hacer para Independiente)

El Rojo se sigue reforzando, aprovechando los billetitos que les dejó el Kun Agüero en la ventanilla con su ida al Atlético de Madrid. Y ahora realmente dio un batacazo. En el medio del debate sobre quién tiene que ponerse la 10 ahora, me enteré del último refuerzo de Independiente, Rodrigo "El rengo" Díaz, proveniente de Lanús.

La pura verdad, Rodrigo Díaz siempre me pareció un 10 hecho a la medida de River o de Independiente. Si no le pesa la camiseta, creo que puede llegar a ser la mejor contratación de los Diablos Rojos para esta temporada.

Abrazos, Martín.